Es cierto que la percepción juega un papel importante en la apreciación de un regalo. Por eso, si nuestro presupuesto no es el ideal, podemos enfocarnos en ofrecer una variedad de opciones y personalizar cada regalo de forma que no deje de transmitir la identidad de la empresa ni el mensaje que buscamos dar. En definitiva, se trata de desafiar nuestra creatividad, lo que debemos hacer cada vez que nos encontramos ante presupuesto que es escaso.
Aquí compartimos algunas ideas simples:
– En lugar de las tradicionales cajas de cartón, podemos optar por bolsas de tela, que no solo son más económicas, sino también amigables con el medio ambiente, agregando un toque sostenible al regalo.
-Como alternativa a un vino de alta gama que puede resultar costoso, podríamos sorprender a nuestros clientes y colaboradores con una degustación de cervezas de diversas variedades, permitiéndoles explorar nuevos sabores. Un regalo que transmite experiencia además de productos.
-Podemos reemplazar los productos en frasco por aquellos que vienen en flow pack o cartón, que nos permiten reducir los costos sin comprometer la calidad de nuestros regalos.
-Además, pensando en destacar aún más nuestros regalos, podemos incorporar elementos diferenciadores en el packaging, característicos de la empresa, regalando así un recuerdo significativo para quienes los reciben.
Con un poco de creatividad y pensamiento estratégico es posible ofrecer regalos de fin de año que se ajusten a nuestras posibilidades financieras y, al mismo tiempo, transmitan nuestro aprecio y gratitud a nuestros clientes y colaboradores.
¿Podemos ayudarte? Lo haremos con gusto
